Nuestro compañero de Voces Meridianas (Radio Malva), Richard Mateos ha sido retenido por la Guardia Incivil junto a Jesús Blasco (Periodismo Humano) en las proximidades de la “Valla de Melilla“. Después de varias horas les han puesto enlibertad, les han confiscado todo el material: cámaras, grabadoras, etc.
Algunas palabras del propio compañero: “Se referían a nosotros como el ciego (Richard Mateos es invidente) y el gordo, nos quitaron todo, nos metieron en un cuarto desde donde yo escuchaba cómo registraban mi coche y decían que no había nada. Les pedí habeas corpus porque una retención sólo puede durar como máximo 45 minutos y yo me he pasado ahí 5 horas. Y se reían. Escuchábamos cómo decían entre ellos que llevábamos tanto tiempo detenidos porque estaban pensando de qué nos iban a denunciar. Me han quitado todo lo que llevaba: mis dos cámaras de fotos, la de vídeo, mi grabadora de voz, el móvil, cuatro tarjetas de memoria y un usb”.
Hace una semana, Richard nos transmitía algunas sensaciones de su estancia en Melilla: “Hola tengo poco tiempo para escribir. Remitiré información hacia el fin de semana. Estamos sobrecogidos por una operación de la policía marroqui auxiliada por paramilitares en los montes cercanos a Melilla. Ha sido una masacre: han asesinado a cinco personas y han quemado el campamento. La información la publica periodismo humano y la confirman ONGS que se mueven al otro lado de la frontera”
El suceso al que hace referencia lo señalaban las compañeras de Periodismo Humano en elsiguiente reportaje.
El encuentro al que acudieron los compañeros: I Encuentro Frontera Sur en Melilla.
Todo nuestro apoyo al compañero Richard, y nuestra repudia a los actos contra los Derechos Humanos que realizan sistemáticamente las fuerzas de los estados español y marroquí en la frontera.
Escucha la entrevista en Radio Klara a Richard
En unos días publicaremos el material que pudo hacernos llegar antes de la detención.
¡Abajo la valla de la vergüenza!
El salto de la valla. Melilla: Donde se pisotean los derechos humanos
Adjuntamos el relato de los hechos d Richard. M
Los hechos son los siguientes:
Sobre las diez y media me llega un mensaje de Prodein sobre un salto de la alambrada por la Purísima (cerca de un centro de menores y del aeropuerto).
Me aconsejan que vaya al Ceti, por si llegara alguien corriendo, y así lo hago. Cuando llego allí, me encuentro con Jesús Blasco, el compañero de Periodismo Humano y con la gente del resto de medios: TVE, el país, etc.
Tras aguantar un rato allí, decidimos acercarnos hacia el aeropuerto, pero los rumores que corrían entre quienes cubrían la noticia apuntaban a que todo había acabado: que habían echado a la gente como hacen últimamente, a través de la alambrada, cosa que es ilegal, y que todo estaba en calma.
Subí al coche de Blasco, con quien anduve grabando de madrugada a las porteadoras, y salimos hacia la zona.
De camino al aeropuerto, Blasco me contó que la carretera estaba cortada (evidentemente por la guardia civil) y decidimos meternos campo a través. Y al poco tiempo, me contó que nos seguía la guardia civil.
Lo que ocurrió, es que el coche del compañero es muy bajo e iba rozándose continuamente con el terreno, que era muy accidentado, y hubo un momento en que nos quedamos atrapados. Le pedimos ayuda a un chaval marroquí que se encontraba en la zona, guardando una granja, y el compañero se puso a buscar ramas, tablas, cualquier cosa que se pudiera colocar en el terreno para poder salir, y fue en ese instante, en el que llegó una pareja de la benemérita.
“¿Qué hacéis aquí” “¿Estáis haciendo fotos?”
Blasco les explica que trabaja para la consejería de medio ambiente de la ciudad autónoma fotografiando especies endémicas de la zona. Ese es el trabajo que le da de comer, pero no se conforman con la explicación:
“No mientas, estabas haciendo fotos”. “Si te pillamos mintiendo, te requisaremos el material”.
Inmediatamente después, hablan por radio con otra patrulla, y escuchamos como les dicen que es mentira, que está haciendo fotos y que es de Prodein (la ONG melillense de derechos humanos de menores y de migrantes).Se ponen más duros, alzan la voz y le piden una y otra vez el material fotográfico, pero el compañero defiende que es su trabajo y les muestra fotografías recientes de especies de la zona. Ellos amenazan, hablan de resistencia, dicen que van a enviar a otra patrulla y que lo van a detener.
Blasco no llevaba ningún tipo de documentación: ni DNI, ni permiso de conducir, y claro, le dicen que además del material, tendrán que identificarlo en la comandancia.
A mí me piden la documentación, les entrego el DNI, y comienzan a cachear a Blasco, a quien previamente le han hecho bajar del coche.
Una vez cacheado vienen a mí, me quieren hacer bajar del coche pero se lo piensan (parece que mi ceguera les hace desistir de ese propósito).
Acto seguido se acercan a mí, y uno de ellos me pregunta si llevo cámara fotográfica. Cómo quieres que lleve cámara fotográfica, respondo, y me objetan que me la puede haber dado mi amigo para que la esconda.
Tras llegar otro coche del instituto armado, nos dicen que les sigamos hacia la comandancia, y así lo hacemos con enormes dificultades por el peligro que provocaba ir en un vehículo no adaptado para ese terreno.
Llegamos a la comandancia y allí, sin mediar palabra, nos conducen a una habitación. No estábamos detenidos pero ni nos decían nada, ni nos dejaban salir.
El tiempo pasó lentamente, y hubo un momento en el que les oímos discutir sobre que harían con nosotros, ya que no estábamos detenidos y nos tenían allí demasiado tiempo. Qué hacemos con el gordo y el ciego, decían.
Finalmente, después de tres horas me soltaron, pero Blasco permaneció cerca de cinco horas adentro.
Al chaval marroquí, que no era responsable de nada, simplemente estaba en la zona cuidando la granja, también le condujeron a la comandancia, y le soltaron un poco después que a mí, y antes que a Blasco.
Cuando estaba en la calle se presentó Palazón y la mujer de Blasco y permanecimos a la espera de que lo soltaran. Cuando lo hicieron, comprobamos que la puerta del conductor estaba forzada, a pesar de que tuvieron las llaves.
No le han devuelto sus herramientas de trabajo, con lo cual, su trabajo para la consejería de medio ambiente, pende de un hilo.
Al compañero le han puesto finalmente varias denuncias: por desobediencia al encontrarse en una zona de seguridad, y no llevar la pegatina de la ItV, que pasó ayer por la mañana, y que llevaba en la guantera.
Para ellos, ni yo, ni el chaval marroquí, hemos hestado retenidos en la comandancia. Sencillamente, no existimos.
Estos son los hechos, lo demás es rumorología.
La alambrada se encontraba a más de un kilómetro de dónde estábamos y además íbamos en dirección contraria, así que no sé que perímetro de seguridad hemos invadido.
El delegado del gobierno, Abdelmalik el Barkani, dice que Blasco se negó a identificarse. Lo cierto, es que no llevaba ninguna documentación encima. Y dice también, que fuimos a la comandancia voluntariamente, pero lo cierto, es que fuimos retenidos de forma irregular.
El salto de hoy:
Sabemos que intentaron entrar unos 200, y que unos cuántos, parece que lo han conseguido. Mientras trataban de echar a la gente (a un puñado de personas las han echado sin contemplaciones, algunas esposadas) entraron en el centro de menores de la zona y golpearon a uno de los chavalines del centro, creyendo que se trataba de alguien de los que intentaron entrar.
Richar Mateos….Melilla 9 d Julio-2013
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